Rodeada de montañas, antiguos glaciares y extensos prados se encuentra la región más pequeña de toda Italia que tiene a Francia y Suiza como frontera. Estoy hablando del Valle d’Aosta, famosa también por su rica gastronomía. De entre todos sus productos mi favorito es sin duda el queso fontina y, de hecho, en un post anterior os proponía una receta con él.

Hasta hace solo unos meses tenía que depender de los viajes de Thomas a Italia para poder comerlo. Por suerte esto cambió el pasado noviembre cuando una tienda de productos italianos abrió en el centro. Un día uno de los dueños nos invitó a probar la fontina que venden así que decidimos preparar una fonduta con ella. Es una receta simple, rápida y muy sabrosa.

INGREDIENTES

140 gr fontina

100 ml leche fresca entera

40 gr mantequilla sin sal

2 yemas

Cebollino al gusto

PREPARACIÓN

Empieza cortando la fontina en trozos pequeños y luego déjalos a remojo un par de horas en un cuenco con la leche. Así absorberá el sabor del queso. A continuación pasa todo a una olla pequeña a fuego bajo para evitar que hierva. Mezcla bien y añade la mantequilla mientras continúas removiendo. Ahora los huevos uno por uno.

Cuando todo esté bien incorporado, apaga el fuego y sirve con un poco de cebollino y un buen pan.

Buon appetito!

Fotografía y Estilismo: Carlota Fariña

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